Ateneo de Córdoba. Calle Rodríguez Sánchez, número 7 (Hermandades del Trabajo).

PRÓXIMOS ACTOS DEL ATENEO DE CÓRDOBA

Nueva Junta Junta Directiva del Ateneo de Córdoba

Marzo , 1a.quincena. Conferencia de JUAN ORTIZ VILLALBA. " LA MASONERÍA EN CÓRDOBA ". (Presenta José Luis García Clavero).
Jueves 11 de abril. Conferencia de DESIDERIO VAQUERIZO." LOS ORIGENES DE CÓRDOBA". (Presenta J.L.G.C).
Finales de abril, primera semana de mayo. Proyección del documental "MONTE HORQUERA" de FERNANDO PENCO, galardonado en diversos Festivales internacionales (Italia, India, Holanda etc,)
Lunes 11 de Mayo. Conferencia de MANUEL VACAS." LA GUERRA CIVIL EN EL NORTE DE LA PROVINCIA DE CÓRDOBA.LAS BATALLAS DE POZOBLANCO Y PEÑARROYA- VALSEQUILLO". (Presenta Antonio BARRAGÁN).Todos los actos en la Sede del Ateneo.

CONVOCADOS LOS PREMIOS DEL ATENEO DE CÓRDOBA
XI Premio de Relato Rafael Mir.
XXXIX Premio de Poesía Juan Bernier.
IX Premio Agustín Gómez de Flamenco Ateneo de Córdoba.

Fallo de las Fiambreras de Plata 2023, relación de homenajeados aquí.

¡Ayúdanos! Amplía artículos

Brigitte Helm

De Ateneo de Córdoba
Saltar a: navegación, buscar
Brigitte Helm.jpg

Brigitte Helm, fue una actriz alemana que se hizo famosa por su doble rol como Maria/Maria-robot en la película Metrópolis (1926), de Fritz Lang.

Infancia

Brigitte Eva Gisela Schittenhelm nació en Berlín, Alemania, el 17 de marzo de 1908. Era la última de entre cuatro hermanos: Elisabeth (Lisa, 1900 – 1989), Adelheid (Heidi, 1901 – 1987), Heinz (1903 – 1906), y Eva Gisela, Brigitte. Su padre era militar, y falleció en 1913, quedando su madre al cuidado de los niños. Justamente fue ella quien introdujo a Brigitte al mundo de la actuación, en una época considerada como los comienzos del cine, la Edad de Plata de la pantalla.

El debut: Metrópolis

Helm fue descubierta por Thea von Harbou, quien se encontraba trabajando en un film junto a su marido, Fritz Lang, desde 1925. Este film era Metrópolis, cuyo rodaje comenzó hacia 1926, y cuya historia estaba basada justamente en una novela del mismo nombre escrita por la propia von Harbou. Para su papel, ni más ni menos que protagónico, la joven Helm, de tan solo 18 años, debería interpretar a dos personajes totalmente opuestos: Maria, la hija de un obrero de los suburbios de Metrópolis, cuya principal labor era la de mantener la paz entre los trabajadores, sobreexplotados por su jefe, Joh Fredersen (interpretado por Alfred Abel), y Maria/Robot, creada por Rotwang el científico (Rudolf Klein-Rögge) bajo orden de Fredersen, y cuyo objetivo era lograr el desorden entre los obreros, para evitar una revuelta contra el propio gobernante de Metrópolis. Durante la película, Maria se enamoraba de Freder (Gustav Fröhlich), hijo de Fredersen. Sin embargo, el rodaje del film implicó un gran esfuerzo para Brigitte: el hecho de interpretar a dos personajes muy diferentes, además de utilizar el pesado y caluroso traje del famoso robot, significó varias horas de grabación y de cansancio para la joven. El film, considerado como uno de los más emblemáticos de la historia del cine, implicó el lanzamiento a la fama de una actriz que, sin embargo, no tendría una larga duración en la pantalla.

Década del 20: Alraune, Abwege y L’Argent

Además de Metrópolis, Helm grabaría dos filmes más durante 1927: Am rande der Welt (Al filo del mundo), y Die Liebe der Jeanne Ney (El amor de Jeanne Ney). En ésta última, dirigida por George W. Pabst, interpreta a una muchacha ciega, prima de la protagonista (Edith Jehanne, como Jeanne Ney), dejando en claro sus dotes actorales. Hacia 1928, los personajes de Helm se alejarían de aquella inocente Maria de Metrópolis, asimilándose más a Maria/Robot, una mujer seductora, decidida, coqueta, desafiante, cualidades muy bien representadas aprovechando sus rasgos físicos, sus particulares ojos claros, y otros aspectos faciales, además de su expresividad y desenvolvimiento. Es asi como en Die Jacht der Sieben Sünden (El Barco de los Siete Pecados, de Jacob y Luise Fleck), Abwege (Crisis, de Pabst), Alraune (Mandrágora, de Henrik Galeen) y L’Argent (El Dinero, de Marcel L’Herbier), Brigitte Helm termina de consagrarse como una de las actrices de moda. Para 1929, sus películas más destacadas fueron Manolescu (de Viktor Tourjansky) y Die Wunderbare Lüge der Nina Petrowna (La maravillosa mentira de Nina Petrona, de Hanns Schwarz). El drama, la seducción y los amoríos son temas principales en todas estas producciones: Asi como en Abwege la historia gira alrededor de una pareja en crisis, en Die Wunderbare Lüge der Nina Petrowna, la protagonista se enamora de un soldado, siendo la esposa del coronel. En Alraune, la hija de un delincuente con una prostituta se bate entre ser una buena o una mala chica, y en L’Argent, de las más reconocidas de Helm en esta etapa, el dueño de un banco se enamora de la esposa de un aviador, lo cual desata la furia de su ex amante, en este caso encarnada en la actriz alemana.

Década del 30, el declive: Mandragore, L’Atlántide, Gold

En 1930, Brigitte Helm volvió a dar vida a Alraune, pero esta vez en su versión hablada, Mandragore o Mandrágora, y dirigida por Richard Oswald. La historia es básicamente la misma, y puede verse además a Helm intepretando la canción Wenn Männer mich betrügen (Cuando los hombres me engañan). Para 1931, compartiría protagonismo una vez más junto a Gustav Fröhlich, Freder Fredersen de Metrópolis, pero esta vez en Gloria. Y en 1932, filmaría quizás su película más reconocida de la era sonora del cine: Die Herrin von Atlantis (La Atlántida, L’Atlantide en su versión francesa, Mistress of Atlantis en su versión inglesa). En ésta última, interpreta a la reina Antinea, que por su poder seductivo logra que uno de los oficiales perdidos en la Atlántida sienta celos de su mejor amigo, por quien la reina sentía un gran amor, desatando la tragedia. Pero los siguientes años no podrían compararse con los últimos de la décadad del 20. La llegada del régimen nazi comenzó a censurar varias producciones nacionales, algo que afectó por supuesto a la carrera de la actriz. Entre 1933 y 1935, sin embargo, ocurrió la etapa más productiva de Helm, considerando la realización de películas tanto en versiones francesas como alemanas, destacándose los filmes Adieu les Beaux Jours (Adiós a los bellos años, de André Beucler), L’etoile de Valencia (La estrella de Valencia, de Serge de Poligny), Furst Woronzeff (Los secretos de Woronzeff, de Arthur Robison) y Geld (Gold, Oro, de Karl Hartl). Su último film, de 1935, se llamó Ein idealer gatte (Un esposo ideal, de Herbert Selpin), y significó el fin de la carrera de una estrella en ascenso, que comenzó a actuar con menos de dos décadas de vida, y que se retiró sin haber llegado a los 30.

Causas del retiro

El motivo pincipal del fin de la carrera de Helm fue la intervención nazi en el cine, que condicionó gran parte de las películas alemanas. Brigitte no quería censura en sus producciones, y optó por retirarse. Pero además, quizás como desafío al régimen, se había casado con un industrial de origen judío, Hugo von Kunheim (1900 - 1984), con quien tendría además cuatro hijos: Matthias, Pieter, Victoria y Christoph. Posteriormente, se casaría con Rudolf Weissbach, de quien terminaría divorciándose. Sin embargo, otro motivo de gran importancia fue el rechazo a Hollywood. Brigitte no quería irse de Alemania, y eso determinó que no aceptase la oferta del papel protagónico para el filme Frankenstein, que finalmente recaería en Elsa Lanchester. Su residencia en Alemania, permitiría que sus principales rivales, Greta Garbo y Marlene Dietrich, fuesen mucho más reconocidas que ella.

Exilio y muerte

Helm se mudó con su familia a Suiza, de donde regresaría a Alemania en 1942 y al finalizar la guerra. Siempre de incógnito, desde su retiro evitó las apariciones públicas y se negó a dar cualquier tipo de entrevista. Su esquive a los medios evitó que pudiese ser fotografiada ya en sus últimos años, algo que Garbo no pudo evitar. Falleció el 11 de junio de 1996, a los 88 años y a raíz de un choque circulatorio, en Ascona, Suiza. Un año antes, había sido homenajeada por la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas de Hollywood.

¿Sobrevaloración?

Brigitte Helm filmó más de 30 películas, y sin embargo, nunca obtendría posteriormente el reconocimiento que si lograron otras actrices de su época. La restauración de Metrópolis la regresó a los primeros planos, algo que, de no haber ocurrido, la hubiese dejado en el completo olvido. Rechazar la propuesta de Hollywood y negarse a las apariciones y entrevistas la autoborraron del mundo del cine, y esto también influyó en un prestigio tardío, que ya había sabido ganarse cuando el cine mudo estaba llegando a su fin.

El presente artículo aporta material procedente de una entrada de Wikipedia, publicada en castellano bajo la licencia Creative Commons-Atribución-Compartir Igual 3.0 (CC-BY-SA) o la licencia GFDL.